Desde hace unos anos, estamos escuchando acusaciones desde todos los sectores hacia los jugadores. Los acusan de ser fiesteros, de ser millonarios sin ambiciones, que van a jugar a la selección solamente porque quedaría mal decir que no.
Con estas teorías de por medio en la mente de la gente, empezó a crecer la idea de formar una selección nacional compuesta solamente por jugadores que juegan en el país.
Los que fomentan esta idea, dicen que los locales tienen hambre de Selección, que jugaran por la camiseta, etc.
Para mi esto de la selección local es una utopia por varios motivos.
Aunque esta pasando por un mal momento, Argentina es un país con tradición futbolera y cuando la albiceleste juega, no hay dudas que los ojos de los equipos del mundo están puestos en ese partido.
Argentina es el país que exporta más jugadores de futbol en el mundo.
Lo que implica que no solo, Barcelona, Real Madrid, Milán o Manchester United, vienen a buscar jugadores.
También están los equipos de Rumania, Rusia, Grecia, Francia, México y demás.
El interés en jugadores del gigante país sudamericano, es debido a que el futbolista argentino es trabajador, rinde y su pase y sueldo en su gran mayoría no cuestan mucho si se los compra de clubes locales (obviamente no hablo de los que van a los grandes, sino a la gran cantidad que son comprados para jugar en ligas menores)
Los deportistas se van a jugar al exterior, porque les ofrecen mas dinero, distintas culturas, distintos desafíos, etc.
Creo que lo que estoy tratando de decir es que como proyecto a largo plazo una selección local es imposible.
Los jugadores con cierta calidad que pueden ser llamados a representar internacionalmente al país, son los mismos que están siendo observados por los espías de los equipos de todo el mundo.
Es decir, hoy están acá, mañana los venden y no son mas parte del equipo local.
Como proyecto a largo plazo es irrealizable.
Si el técnico cree que los que están en Argentina deben jugar, entonces que los convoque, si no, que no lo haga.
Si los que juegan regularmente son fiesteros, y todo lo demás, que intente corregir esa conducta o que no los ponga.
Lo único que debe interesar es la coherencia del programa del entrenador y no adonde juegan los convocados.
Con estas teorías de por medio en la mente de la gente, empezó a crecer la idea de formar una selección nacional compuesta solamente por jugadores que juegan en el país.
Los que fomentan esta idea, dicen que los locales tienen hambre de Selección, que jugaran por la camiseta, etc.
Para mi esto de la selección local es una utopia por varios motivos.
Aunque esta pasando por un mal momento, Argentina es un país con tradición futbolera y cuando la albiceleste juega, no hay dudas que los ojos de los equipos del mundo están puestos en ese partido.
Argentina es el país que exporta más jugadores de futbol en el mundo.
Lo que implica que no solo, Barcelona, Real Madrid, Milán o Manchester United, vienen a buscar jugadores.
También están los equipos de Rumania, Rusia, Grecia, Francia, México y demás.
El interés en jugadores del gigante país sudamericano, es debido a que el futbolista argentino es trabajador, rinde y su pase y sueldo en su gran mayoría no cuestan mucho si se los compra de clubes locales (obviamente no hablo de los que van a los grandes, sino a la gran cantidad que son comprados para jugar en ligas menores)
Los deportistas se van a jugar al exterior, porque les ofrecen mas dinero, distintas culturas, distintos desafíos, etc.
Creo que lo que estoy tratando de decir es que como proyecto a largo plazo una selección local es imposible.
Los jugadores con cierta calidad que pueden ser llamados a representar internacionalmente al país, son los mismos que están siendo observados por los espías de los equipos de todo el mundo.
Es decir, hoy están acá, mañana los venden y no son mas parte del equipo local.
Como proyecto a largo plazo es irrealizable.
Si el técnico cree que los que están en Argentina deben jugar, entonces que los convoque, si no, que no lo haga.
Si los que juegan regularmente son fiesteros, y todo lo demás, que intente corregir esa conducta o que no los ponga.
Lo único que debe interesar es la coherencia del programa del entrenador y no adonde juegan los convocados.