Hoy, en plena Navidad, escuche un programa de televisión rosarino y no lo pude creer.
Le hacían una entrevista telefónica y un poco informal a Ricardo Caruso Lombardi
y en esa entrevista dijo cosas que aunque se quiera ser honesto y frontal, no se dicen.
El señor es el técnico de Quilmes en este momento, y el motivo del llamado fue porque querían preguntarle si era verdad que lo habían llamado de Newell’s para ser el próximo técnico de la Lepra.
Repitiendo una vez mas todo lo que ya es de conocimiento publico acerca de Schiavi y Cagna, ventilo cosas que a mí me demuestran porque es un técnico que tuvo 16 equipos en 18 anos. Por falta de tacto, por falta de caballerosidad, por falta de lealtad hacia esos que le dan trabajo.
Cuando la pregunta directa fue si le gustaría ya mismo ser el técnico de Newell’s. Su respuesta inmediata fue si. Ni siquiera se tomo la delicadeza de decir que era algo hipotético, que no quisiera hablar del tema mientras sea técnico de otro equipo o cualquier otra señal positiva hacia el club que hoy por hoy lo emplea.
Pero no termino allí, la pregunta siguiente fue, si sabia cuanto pedía Quilmes por la rescisión de su contrato. Y el otra vez, mando a sus patrones al frente diciendo el precio que cualquiera debería pagar para contratarlo.
Es decir, se vendió el solito.
Como si esto fuera poco y para “encariñarse” rápidamente con el equipo rosarino que estaría interesado en contratarlo dijo “Por suerte para Newell’s a Cagna no le fue bien”
Si a Cagna no le fue bien, quiere decir que a Newell’s no le fue bien. ¿Como es eso de que “por suerte” no le fue bien?
Es este tipo de declaraciones y actitudes es la que lleva a su curriculum a verse como se ve.
Nadie niega los resultados, nadie niega su capacidad (gano 3 títulos de Primera B), y tiene talento.
Pero si ustedes o yo vamos a una entrevista laboral en la que nuestra experiencia muestra que tuvimos 16 trabajos distintos en 18 anos, nos mirarían con dudas y seguro nos preguntarían muchas cosas respecto a ello.
Lo que Caruso Lombardi necesita es dedicarse a lo suyo, respaldar a los que le muestran confianza contratándolo y preocuparse por el presente y el futuro, lo que fue, ya paso.
Le hacían una entrevista telefónica y un poco informal a Ricardo Caruso Lombardi
y en esa entrevista dijo cosas que aunque se quiera ser honesto y frontal, no se dicen.
El señor es el técnico de Quilmes en este momento, y el motivo del llamado fue porque querían preguntarle si era verdad que lo habían llamado de Newell’s para ser el próximo técnico de la Lepra.
Repitiendo una vez mas todo lo que ya es de conocimiento publico acerca de Schiavi y Cagna, ventilo cosas que a mí me demuestran porque es un técnico que tuvo 16 equipos en 18 anos. Por falta de tacto, por falta de caballerosidad, por falta de lealtad hacia esos que le dan trabajo.
Cuando la pregunta directa fue si le gustaría ya mismo ser el técnico de Newell’s. Su respuesta inmediata fue si. Ni siquiera se tomo la delicadeza de decir que era algo hipotético, que no quisiera hablar del tema mientras sea técnico de otro equipo o cualquier otra señal positiva hacia el club que hoy por hoy lo emplea.
Pero no termino allí, la pregunta siguiente fue, si sabia cuanto pedía Quilmes por la rescisión de su contrato. Y el otra vez, mando a sus patrones al frente diciendo el precio que cualquiera debería pagar para contratarlo.
Es decir, se vendió el solito.
Como si esto fuera poco y para “encariñarse” rápidamente con el equipo rosarino que estaría interesado en contratarlo dijo “Por suerte para Newell’s a Cagna no le fue bien”
Si a Cagna no le fue bien, quiere decir que a Newell’s no le fue bien. ¿Como es eso de que “por suerte” no le fue bien?
Es este tipo de declaraciones y actitudes es la que lleva a su curriculum a verse como se ve.
Nadie niega los resultados, nadie niega su capacidad (gano 3 títulos de Primera B), y tiene talento.
Pero si ustedes o yo vamos a una entrevista laboral en la que nuestra experiencia muestra que tuvimos 16 trabajos distintos en 18 anos, nos mirarían con dudas y seguro nos preguntarían muchas cosas respecto a ello.
Lo que Caruso Lombardi necesita es dedicarse a lo suyo, respaldar a los que le muestran confianza contratándolo y preocuparse por el presente y el futuro, lo que fue, ya paso.